En el versículo 2:16 de la carta a los Gálatas el apóstol Pablo enseña así:  Gálatas 2:16 "pero sabiendo que ningún hombre es justificado por las obras de la ley, sino por medio de la fe en Yahshua HaMashiaj, hemos creído nosotros también en Yahshua HaMashiaj  para que seamos justificados por la fe en HaMashiaj, y no por las obras de la ley. Porque por las obras de la ley nadie será justificado."

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El mismo apóstol Pablo también nos enseña en la carta a los  Romanos 2:13 Porque no son los oidores de la ley los que son justos delante de Elohim, sino que los hacedores de la ley serán justificados.

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A primera vista pareciera una contradicción.   Sin embargo un análisis más profundo no deja ninguna duda que lo que Pablo escribió a los Gálatas es que se abstengan de creer en que las obras de la ley justifican por sí solas, sin requerir la fé en Yahshua HaMashiaj.  Es preciso mencionar que el judaísmo rabínico sostiene, hasta el día de hoy, que la práctica de las 7 leyes Noajidas son obligantes y por sí solas otorgan justicia al gentil.  Estas 7 leyes Noajidas omiten siniestramente los mandamientos de amar a Yahweh por sobre todas las cosas, amar al prójimo como Él nos amó y el mandamiento de guardar el séptimo día (día de reposo).   Esto también contradice: “La misma ley se aplicará al nativo y al extranjero que viva entre ustedes.” (Exodo 12:49)



​Otros opinan que que había una corriente de pensamiento de que la observancia de algunos preceptos de la Torah, sin siquiera intervenir la gracia de Yahweh, podían conferir justicia.  Esta corriente de pensamiento se desarrolló en el primer siglo y desapareció en el tercer o cuarto siglo.    Sólo podemos entenderlo mejor ahora que se encontró evidencia arqueológica en los Rollos del Mar Muerto (RMM).    Las "obras de la ley" se encuentran en lo que se llama  Miqsat Ma'ase Ha-Torah, o MMT, cuya traducción, según Strugnell y Qimron, es "Algunos Preceptos de la Torá."  La MMT no se encuentra en ninguna parte del judaísmo rabínico.

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El siguiente enlace es pertinente al tema.

  

http://www.ccg.org/spanish/s/p104.html



Mientras que en Pablo a los Romanos, la carta a los Hebreos, y la carta de Santiago se les advierte a los creyentes que si bien la salvación es gratuita por la fé en Yahshua HaMashiach, la ley de Yahweh no ha sido ni será abolida.   De allí que el Mesías declara: si me amáis  guardad mis mandamientos.    En 1 Juan 2:4 El que dice que le conoce pero no guarda sus mandamientos es mentiroso.   En Romanos los hacedores de la Ley (Torá) son justos y serán justificados, en Hebreos aquellos de la galería de los héroes de la fe fueron hallados justos y alcanzaron salvación gratuita por las obras de la Torá.  Ejemplo, Abraham iba a sacrificar a Isaac porque amaba a Yahweh por sobretodas las cosas.   Este es el principal y primer mandamiento de la Torá aunque aún no había sido dado en Sinaí.    En Santiago (Yaacov) la fé sin obras es muerta.   ¿Y cuáles son las obras de la fe?  Las de la Torá, las enseñanzas, instrucciones y mandamientos de Yahshua y de sus discípulos, pues son Instrucción y Lumbrera.  Proverbios  3:1 Hijo mío, no te olvides de mi instrucción (Torah), y guarde tu corazón mis mandamientos (mitzvot);   Proverbios 6:23 Porque el mandamiento (mitzvot) es antorcha, y la instrucción (Torah) es luz. Y las reprensiones de la disciplina son camino de vida (Yo Soy El Camino, la Verdad y la Vida nos dice Yahshua). Salmo 119:105  Lámpara es a mis pies tu palabra (el Verbo de Elohim es Yahshua), y lumbrera a mi camino (Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida nos dice Yahshua).



Pedro advierte explícitamente de este error de torcer y distorsionar las enseñanzas de Pablo, en 2 Pedro 3:15-17.   Estemos atentos al siguiente versículo reparando que muchas traducciones no hacen justicia al texto griego.  Por ello utilizaremos la Versión Israelita Nazarena (VIN)

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2 Pedro 3:17  Así que ustedes, amados, ya que saben esto de antemano, tengan cuidado; no vaya a ser que se desvíen por el engaño de los sin-ley (​Lexicon Strong G113 "athesmos"), y caigan de su firmeza.



Yahshua mismo advierte que se aparten de Él los que le reclaman el haber: profetizado, expulsado demonios y haber hecho milagros en su Nombre en:

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Mateo 7:23  Entonces yo les declararé: ‘Nunca los conocí. ¡Apártense de mí, obreros sin ley!’  (​Lexicon Strong G458 "anomia")

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La fe bíblica no es: magia, positivismo, prosperidad, esoterismo, misticismo o contemplación sino que tiene obras y éstas obras son de la palabra (el Verbo de Elohim), instrucción (Torah) y los mandamientos (mitzvot) de Yahweh.   La fe es primeramente "confianza obediente" durante la tempestad (Mateo 8:24; Marcos 4:37; Lucas 8:23) y es necesaria durante nuestra travesía por el desierto donde nos lleva  Yahweh para que escuchemos sus palabras con verdadera sed para ser saciados  (Oseas 2:14 ).