La higuera es comparada a Judá pero más precisamente Jerusalén  ( ver también Jeremías  24:1-8).  Veámoslo en éstas dos parábolas:   

Lucas 13:4 O aquellos dieciocho sobre los cuales cayó la torre de Siloé y los mató, ¿pensáis que ellos habrán sido más culpables que todos los hombres que viven en Jerusalén?

​Lucas 13:5 Os digo que no; más bien, si no os arrepentís, todos pereceréis de la misma manera."
Lucas 13:6 Entonces dijo esta parábola: "Cierto hombre tenía una higuera plantada en su viña, y fue a buscar fruto en ella y no lo halló.
Lucas 13:7 Entonces dijo al viñador: ’He aquí, ya son tres años que vengo buscando fruto en esta higuera y no lo hallo. Por tanto, córtala. ¿Por qué ha de inutilizar también la tierra?’      (La viña de Yahweh es ciertamente la casa de Israel pero Judá es la planta placentera en medio de la viña Isaías 5:7)​

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Jerusalén fue anteriormente habitada por judíos pero la ciudadela de Sión y el monte Moriah fue tomado de los jebuseos por David hace tres mil años lo que concuerda con los tres años, proféticos de mil años cada uno.


Lucas 13:8 Entonces él le respondió diciendo: ’Señor, déjala aún este año, hasta que yo cave alrededor de ella y la abone.

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El viñador la va a estar cavando y abonando para que de frutos de arrepentimiento.


Lucas 13:9 Si da fruto en el futuro, bien; y si no, la cortarás.’ "



El fruto que El Señor de la viña busca en su higuera en esta parábola es fruto de arrepentimiento.    Lo que encuentra es sólo hojas de higuera  semejante a aquellas que Adán y Eva utilizaron para cubrir su desnudez después de haber pecado en el jardín del Edén    

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Génesis 3:7 Y fueron abiertos los ojos de ambos, ​y se dieron cuenta de que estaban desnudos. Entonces cosieron hojas de higuera, y se hicieron ceñidores.    

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Y éstas vestimentas son totalmente inadecuadas para cubrir la desnudez y vergüenza causada por el pecado.    Estas ropas de hojas de higuera cosidas están tipificando la justicia propia.    Esto es semejante a las interpretaciones rabínicas del fariseísmo conocido como "obras de la ley" en el Nuevo Testamento en Gálatas 2:16.   Elohim en cambio les da pieles de animales que obviamente fueron víctimas inocentes del pecado.  Hebreos 9:22 pues según la ley casi todo es purificado con sangre, y sin derramamiento de sangre no hay perdón. 

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Jerusalén representaba la sede del gobierno secular civil  y  del gobierno espiritual.   En el año 70 A.D. ocurrió la destrucción del Segundo Templo en Jerusalén y la dispersión de Judíos por la persecución desatada por los romanos.   Los discípulos estuvieron prevenidos por Yahshua y lograron escapar del asedio y juicio que vino sobre Jerusalén.   De esta manera la secta judía del Camino de Yahshua sobrevivió en la diáspora.   El fariseísmo rabínico también sobrevivió en la diáspora y es lo que se conoce hoy como judaísmo ortodoxo.  Ellos conservaron su identidad nacional durante el exilio conservando la circuncisión, la Toraj, los shabats y los festivales.   Hoy también Jerusalén representa la sede del gobierno civil y del gobierno espiritual de toda Judea que constituye el estado de Israel actual.    Entendiendo que las diez tribus del reino del norte no están aún representadas en el moderno estado de Israel. 

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En lo que se conoce como el Apocalipsis de Yahshua en Mateo 24 vemos que la mención de la higuera, tipificando a la entonces futura Jerusalén, se repite.

Mateo 24:32 »De la higuera aprended la analogía: Cuando su rama ya está tierna y brotan sus hojas, sabéis que el verano está cerca.

Mateo 24:33 Así también vosotros, cuando veáis todas estas cosas, sabed que está cerca, a las puertas.
Mateo  24:34 De cierto os digo que no pasará esta generación hasta que todas estas cosas sucedan.

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Pero las diez tribus del reino del norte dispersas por todas las naciones aún no están representadas por Jerusalén.   Estos descendientes de las tribus del norte sólo mantienen su cohesión e identidad nacional por su fe y obediencia a Yahshua haMashiaj, Sus mandamientos, la circuncisión del corazón  y la obra del Espíritu Santo en sus vidas.